Cinema de Temporada

El cine y el teatro, dos géneros artísticos en diálogo permanente

Giacommo Casanova empieza sus memorias recordando que el bien surge del mal tal y como el mal sale del bien. Història de la meva mort de Albert Serra parece querer ser la demostración de estas palabras de Casanova. Serra filma un mundo en el que la libertad y el hedonismo eran posibles, hasta que el mal acabó destruyéndolo todo. Unos reinventados Casanova y Drácula, que se mueven entre el siglo de las luces y el oscurantismo nos recuerdan que lo atávico continúa poniendo en crisis las conquistas de la sociedad laica.

Temporada Alta apuesta este año por estrenar en el estado español la nueva película de Albert Serra, convirtiéndola en uno de los grandes acontecimientos del Festival. De este modo la vieja colaboración entre el cine Truffaut y Temporada Alta se amplía para convertir la sala en un espacio más de su programación. El estreno de Albert Serra coincide con la presentación de El cuaderno de barro de Isaki Lacuesta, película hecha como complemento de Los pasos dobles -Concha de oro en el festival de San Sebastián 2011- que recoge la performance que Miquel Barceló y Josef Nadj realizaron en Malí, después de haber triunfado en Aviñón y en el Teatro Libre, entre otros lugares. La presencia de Josef Nadj en el festival, con el espectáculo Woyzeck, nos permite resucitar esta película. Las relaciones entre el cine y el teatro -o mejor dicho entre la danza y el cine- tienen un punto culminante en la película Pina (2011) de Wim Wenders, en la que los bailarines de Wüppertal reconstruyen algunos de los números emblemáticos de la actriz ante una cámara que los filma en 3D.

El resultado es otra forma de ver la danza y una de las pocas películas que ha explorado a fondo las posibilidades del 3D por reconfigurar el espacio.

Àngel Quintana

Col·lectiu de Crítics de Cinema de Girona